ZALGUIRIS 79 REAL MADRID 90
INSACIABLES
Octavo contra primero.
Curiosamente el Zalguiris ha perdido sus dos partidos en casa, pero ha vencido
en sus dos desplazamientos. Ya nos tenían ganas, pero a esto hay que añadir que
están deseando dar una alegría a su público. Tiene una base de jugadores
lituanos, cinco americanos y un francés. El equipo de este año es una incógnita
para mí. Ya veremos que tal les va, pero recordemos que la anterior temporada
quedó tercero.
32-18 fue el resultado del primer cuarto. Se podría pensar que el
equipo estuvo mal, pero hay que apuntarle el mérito al equipo de casa: les salió absolutamente todo, acierto
en el tiro, rebote, sin cometer fallos, defensa durísima y agresiva…
En el segundo cuarto las cosas se fueron colocando en su sitio, poco a
poco. Mejoramos la defensa y fuimos encontrando el acierto que nos faltaba, a
cuenta de Carroll (7 puntos) y de Randolph (otros 7), que había estado negado hasta
ese momento. La reacción culminó con un parcial 2-12 y nos fuimos al vestuario
con solo 1 punto de desventaja: 44-43.
Arrancamos con un triple de
Randolph que nos puso ¡por fin! Por delante en el marcador. La mayor parte del
tiempo fue de toma y daca, pero el rival, haciendo un desgaste tremendo, se
impuso al final, dominando el juego interior, en el que Ayón no estaba teniendo
su día. 68-62.
El último cuarto fue nuestro de cabo a rabo, como el primero, pero al revés. Ayón resucitó y
se hizo notar en toda la cancha, nos fuimos imponiendo física y
baloncestísticamente, remontamos con un parcial 5-13, y Rudy –EL MÁS ODIADO EN
KAUNAS- ¿QUIÉN SI NO? les dio la
puntilla con 4 triples seguidos.
¿Cómo estuvieron las fieras?.- FEROCES. Ayón, de menos a más,
hizo la friolera de 13 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias y 30 de valoración;
Rudy, piramidal en los minutos finales con sus cuatro triples que deprimieron a
toda Lituania. Y todo el acompañamiento, empezando con un Randolph que no
empezó bien, pero acabó con 16 puntos y 13 de valoración.
Que se sepa que Zalguiris hizo
el partido perfecto hasta los minutos finales y que NUNCA BAJÓ LOS BRAZOS; esta victoria tiene un mérito
descomunal (remontamos 14 puntos y vencimos de 11 a domicilio), porque los jugadores y el entrenador tienen un hambre insaciable de
victorias.
¡¡¡¡HALAMADRID!!!
Por Paquito
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